sábado, 29 de septiembre de 2007

Sangre marina



Estaba yo en la cocina de mi casa con una tranquilidad impresionante. Mis ojos se serraron, y respiré profundamente, inhalando por la nariz. Mis pulmones se llenaron suave y progresivamente. Luego exhalé muy despacio. Aquello me pareció muy confortable. Parecía que estaba solo en el mundo por unos momentos. Me dije a mi mismo: -Hace tiempo que no estaba tan tranquilo-. No es que no me guste estar acompañado pero a veces uno necesita tiempo para estar solo inmenso en el ruido provocado por el silencio. En determinado momento pase mi mano por el mentón (mío también claro está) y empecé a ascender por mi cara. Primero la mejilla, en segundo lugar el ojo, luego la frente y por ultimo el pelo. Lo recorrí con mi mano un par de veces y cinché suavemente de él. Bajé la mano que fue a dar al posabrazos de la silla sobre la cual me encontraba. Comencé a observar la silla por alguna razón que aun desconozco .Era muy blanca y con una textura muy lisa. En las esquinas tenia varios raspones. A continuación mi mirada, se poso fuera de la ventana, atravesando el vidrio, viendo así la calle de balastro y los árboles que hay después. No había ni gota de viento. Tampoco estaba presente la habitual polvadera que levantan los autos al pasar, ya que en al menos una hora no había cruzado ni un vehículo. Tomé un libro que había sobre la mesa que se titulaba: “En la perplejidad del desierto marítimo”.Lo había comprado unos veinte días antes. Lo agarre en mis manos y comencé a darlo vueltas en todas direcciones. Me fijé en los tres lados donde se veía el blanco espesor de las hojas. Observé la imagen que yacía en la tapa del libro. Parecía un cálido lugar, azul y solitario. Abrí el libro y comencé a leer. Esta obra constaba de apenas XII capítulos, una novela poco extensa pero muy interesante, según me dijeron los tres primeros. Hasta ahora la historia era sobre un grupo de hombres que viajaba en el mar, y les sucedían diferentes cosas a cada uno de ellos. La muerte se presentaba en cada uno de los capítulos, decayendo por lo menos dos de los tripulantes en cada sección de libro. Yo estaba tan interesado avanzando en la lectura que mis ojos parecían no haberse dado cuanta de que el libro había pasado de ser blanco como la nieve a ser de un rosado clarito. Solo me di percaté de esto cuando llegue al séptimo capitulo, ya que las hojas del libro eran de un color ya pasando un poco el rosado claro para internarse en un tono más oscuro. Pensé que me estaba volviendo loco, ya que había escuchado historias raras sobre libros, pero nunca una que dijera que cambiaba el color de las páginas. Sacudí fuertemente la cabeza para ver si era que mis ojos estaban cansados ya de leer, pero esto no dio resultado, las páginas no emblanquecieron. Si yo no me estaba equivocando el libro cambiaba de color a medida que seguía leyendo. Luego cuando llegué al noveno capítulo, y que solo quedaran siete tripulantes, o sea siete personajes vivos en la historia, me di cuanta de que cada vez que moría alguien se daba un cambio medianamente brusco en el tono del libro que para ese entonces se parecía más a un tono rojizo. También después de un rato comprendí que antes de empezar a leer tenia una temperatura corporal mucho mayor a la de ahora y estaba empezando a temblar, sintiendo como los chuchos de frío me recorrían de pies a cabeza. A pesar de todo esto decidí que debía continuar leyendo. De este modo avancé rápidamente y en unos minutos estaba frente a un “XII” gigante lo que me indicó que solo me faltaba explorar el último capítulo. En este momento solo quedaba un tripulante a bordo, ya que los otros murieron, unos de sed, otros de hambre, y algunos se tiraron al mar alucinando y fueron devorados por los Folipurdos (animales carnívoros habitantes en algunas aguas del Mediterráneo, los cuales son conocidos por su tamaño, que supera aun el de un tiburón blanco).El libro estaba de un rojo altamente llamativo y de un momento a otro las letras pasaron a ser blancas. La muerte del único sobreviviente y protagonista de la historia era algo que yo “veía venir” desde hace tiempo. El marinero solo y sin recursos sobre un barco pequeño era azotado por una tormenta. Si se quedaba en el barco moriría de hambre, de sed y/o frió y si saltaba iba a ser devorado. No sabia que hacer. Sin embargo fue el destino quien se encargo de decidir por él .Una ola sobrepasó el barco y lo arrastró con ella. El único de los personajes que aun conservaba su vida mientras caía por la borda, ya sabia que le esperaba al mojarse, al introducirse en el mundo marino. Las páginas estaban ya más que rojas, estaban moradas. Y justo en el momento en que unos enormes dientes hacían contacto con su piel sentí que hilos gruesos de sangre corrían bajo mi cuello.

jueves, 27 de septiembre de 2007

Harrymanía


Puedo afirmar que llegué a los 15 años sin leer un libro completo.Creo que lo máximo que había leído hasta mayo de 2007 eran textos de la extención de un cuento(excluyendo la lectura para el liceo).

Por otra parte soy un gran "fans" de las películas de Harry Potter. Hace unos meses se estreno "Harry Potter y la Orden del fenix" y la fui a ver al Shopping con un par de amigas.Dimos unas vueltas antes de ver la película, ya que la función empesaba como una hora más tarde de lo que habíamos llegado.En ese transcurso nos pusimos hablar de como sería la "peli".Estábamos muy intrigados los tres.Una de las chiquilinas ya había leído el libro sobre el cual se basaba el film.Además leyó todos los libros anteriores. Entonces nos comentaba los sucesos mas importantes de la saga en general, y sobre todo de la película que veríamos a continuación.Me quedé muy sorprendido ya que yo había visto todas los largometrajes y sin embargo ella decía cosas que yo no sabía.Lo que pasa es que en los libros aparecen cosas explicadas que no se registran el las películas o que se les realizan cambios.Debo decir que me sentí muy indignado conmigo mismo.También muy ansioso.Esos comentarios que ella nos hacía, me ayudaron a entender mejor la temática de la saga, ahora todo comenzaba a cobrar sentido.La otra chica no se sorprendió tanto como yo ya que ella había leído hasta el tercer libro: "Harry Potter y el prisionero de Azkaban".

Mi cabeza funcionaba al máximo ,registrando cada palabra de lo que decía mi amiga.Luego de un rato entramos a ver la película.Creo que fue la mejor de todas en lo que respecta a efectos especiales, opinión que compartimos los tres.Al termino de la película y luego de unos quince minutos salimos del hipercentro.

Cuando llegué a mi casa en lo único que pensaba era en saber más sobre la historia dictada por J.K.Rowling, de modo que me decidí a leer el primer libro.En eso y pensando en mañana y en lo patético que me vería leyendo, el sueño de apoderó de mi.

Al otro día cuando me desperté, a mis padres se les había ocurrido la idea de ir hasta Devoto y luego al Shopping.Cuando entramos al primer lugar nombrado ,me fui a la sección de los libros,para ojear las ofertas.De repente mi mirada se fijo en un solo libro.No era el que buscaba ahora, pero sin embargo era el sexto libro de la saga :"Harry Potter y el Príncipe mestizo" , a un precio bastante accesible.No lo dudé ni un segundo y tan rápido como pude reaccionar se podía ver al dicho libro ya en el carrito.Si bien no me serbía en el momento después lo leería de todas formas.Luego salimos de Devoto y fuimos al Shopping.Allí me dirigí directamente a la librería.Pregunte por el libro numero uno de Harry Potter, de la editorial Salamandra.Me ofrecieron el libro ,pero me dijeron que había un promoción.Esta ofrecía el primer y segundo libro de Harry por casi el mismo precio que uno solo de modo que la pregunta:¿Qué hago?, ni se me paso por la mente.De esa forma me fui muy contento ya que mi objetivo era comprar solo "Harry Potter y la piedra filosofal"(primer libro) y ahora tenia tres libros ,!!genial!!.Desde que llegué a mi casa me descargue en el sillón y comencé a leer ,como loco.Ese libro lo terminé en dos días y fue genial.El segundo("Harry Potter y la cámara secreta") me llevó casi cuatro días;también espectacular.Comencé a ver las diferencias libro-película y me di cuenta de que eran bastante importantes.Luego de eso vino el tercer libro(lo conseguí prestado).Este fue mucho mas largo(en el sentido del tiempo que demoré) ya que me llevo como un mes porque perdí bastante la continuidad de la lectura.Algunos días por cansancio ,otros porque tenia tarea.En cuanto terminé ese comencé el cuarto:"Harry Potter y el cáliz de fuego".Un gran libro genial.Mi interés fue aumentando día a día.Cuando lo terminé (me llevo como veinticinco días) me dije -Wow , esto si es un libro-.De la misma manera que cerré este libro pero inversamente abrí el quinto:"Harry Potter y la Orden del Fénix".Apenas voy en el capitulo VII pero ya lo quiero terminar,para poder comenzar el sexto.Ahora comprendo lo que dice mi amiga:"Las películas son para los lectores".

Siempre pensé(hasta hace unos meses) que leer novelas, era muy ,pero muy aburrido, que no tenia sentido y que no me iba a servir de nada.Sin embargo J.K.Rowling cambió mi forma de pensar.Hoy digo que el libro es un arma para abrir nuevos horizontes.Es una conección irrompible entre el lector, el narrador y el autor.El libro es un mundo hecho exclusivamente para el lector.Está hecho para que lo disfrute y sea parte de su vida.Un libro es mucho más que un trozo de papel con tinta...







viernes, 21 de septiembre de 2007

Filosofía: un aburrimiento interesante




Para muchos la filosofía es muy aburrida. En mi grupo cuando tenemos " fil" parece que llegara la hora de la siesta. Da la sensación de que los alumnos tomaron un "plidex" antes de ingresar a la clase. Casi todos contestan de mal humor ante la pregunta :-¿Qué tenemos ahora?-;haciendo gestos de pocas ganas y de "Ahora esta vieja/o se pasa toda la clase hablando y no entiendo un carajo".
En mi opinión personal pienso que es muy atractiva.
Gran cantidad de libros hablan de la filosofía como una ciencia (diferente a la biología ,la física o la química, pero en fin una ciencia); otros la definen como un saber.
Desde mi perspectiva personal no tomo ninguna de las dos posturas, sino que la defino como un camino, que lleva hacia el conocimiento, la verdad, las esencias de las cosas.Pero ese camino se encuentra cerrado para la gran parte de nosotros.Solo puede abrirse cuando se presenta ante él una persona dispuesta a dejar todos los sentimientos de certeza, que fueron inculcados en ella desde muy pequeños(a la mayoría de las personas nos pasa, pero la solucion está en aprender a superarlo, en dejar de creer que el mundo es como se lo "ve"y nada más).Esa persona debe ser abierta a lo nuevo, y debe saber encontrar hasta en la cabeza de un alfiler una duda ,algo que mantenga alejada a la certeza.El filosofo es aquel que recorre ese camino , disfruta de él y lo convierte en su vida; pero nunca espera llegar al final , porque sabe que es imposible.

miércoles, 19 de septiembre de 2007

LA NOCHE EMPIEZA A LAS TRES…



Apenas aparecían algunos rayos de luz en Villa Candela. Era como su nombre lo indica una villa, un pequeño pueblito en el cual la gente rica no existía. El trabajo, el sacrificio, la pobreza y las familias numerosas son todas cosas que definían casi perfectamente al lugar.
En casa de los Lupe se internaban unos débiles rayos luminosos provenientes del crepúsculo que se hacia presente en el momento. Era un rancho (como la mayoría de los de la zona) con paredes de adobe y techo de paja. En él vivían don Tibio conocido como “Mingo”, su esposa Emena a la que le decían “Nena” y sus siete hijos: Alquidez, Maperal, Oriundo, Fortuño, Lian, Oscar y Ruper.
Ya hacía horas que el padre de familia estaba despierto pero solo hacía poco más de media hora que había abandonado su cama. Tanto él como su esposa estaban sentados en un par de bancos, frente a una mesa de madera, en la que Emena había puesto el mate pronto para cebar y colocado un pan casero que había sido horneado hace tres días en la casa de una vecina llamada Petrona. Solo se sentía el roncar de algunos de sus hijos, que cada tanto era superado por el canto de las aves, el gemido de algún animal o el ladrido de los perros. De repente se escucha la voz de la “Nena” que le hablaba a su marido diciendo:-Voy a llamar a los gurises para que tomen unos mates y luego se vallan a trabajar contigo-(se refería sus dos descendientes más grandes: Alquidez y Maperal , que trabajaban con su padre como leñadores en el monte que estaba a unos cinco kilómetros de su casa, al que llegaban bordeando el río).A esto don Tibio contestó:-si diles que se apuren que tenemos mucho que hacer hoy –.La intención de Mingo era darle a sus hijos una razón para que se levantaran rápido ,pero la verdad esa frase era poco estimuladora y considerando esto su señora decidió no mencionárselo a los muchachos. Simplemente les dio una sacudida diciendo a la vez:¡¡¡¡Arriba!!! , ya es la hora-.Su voz fue lo bastante estridente para que se escuchara desde afuera de la casa, y los jóvenes decidieron levantarse sin dudarlo, ya que no querían que su madre volviera a llamarlos y así sufrir un aturdimiento que les durara todo el día.
Los demás hermanos seguían durmiendo, aunque Ruper estuvo apunto de entreabrir los ojos.
Luego de haber pasado otra media hora más salieron los tres al encuentro con los árboles. En ese mismo momento, luego de haberse despedido, Emena comenzó a arreglar el rancho. Lo primero que hizo fue limpiar la mesa, y luego barrer, con una escoba hecha con un palo, que en la punta tenía atadas varias ramas de chirca, las cuales cambiaba con una frecuencia de tres o cuatro días. En esos momentos el sol brindaba un gran espectáculo con su salida, ya que era un día totalmente despejado, y su aparición sobre el horizonte se inundó de un color rojizo que coloreaba a su vez la niebla que aun había en los terrenos más bajos, y se reflejaba en las aguas estáticas de río. La mujer se detuvo a contemplar el fenómeno, que aunque era ya muy común, traía consigo cosas nuevas siempre y era algo que al observarlo causaba más placer cada día.
Dejó pasar alrededor de una hora antes de llamar al resto de sus hijos para ir a la escuela .Ellos concurrían a una institución que se llamaba “Sigifredo Díaz” en honor a su fundador. Entraban a las ocho de la mañana, y salían a las tres de la tarde. Luego de que Oriundo, Fortuño, Lian, Oscar y Ruper se levantaron, desayunaron y esperaron un rato para que llegara la hora de ir a la escuela.
Cuando se fueron, su madre se retiró a trabajar a la quinta que tenían en el fondo de su casa. En ella plantaban la mayor parte de las frutas y verduras que consumían; y del mantenimiento se ocupaba Emena. Era impresionante como el calor ya alrededor de las nueve de la mañana era abrasador; y tanto Emena como Mingo y sus hijos que estaban trabajando en el monte se secaban las gotas de sudor que estaban en su cara y caían en sus ojos provocándoles ardor e impidiéndoles ver. Ya para las doce el calor era infernal, pero por suerte era la hora de descanso de los monteadores, y se puede decir que también de las labradoras.
A las tres en punto sonó la campana que indicaba la salida de los niños de la escuela, y diez minutos más tarde arribaron los hijos de Mingo en su casa. Oriundo, Fortuño y Lian rogaron a su madre que les dejara ir a jugar al fútbol con sus amigos en el campo y ella aceptó. Ellos amaban el “jugar a la pelota”, de tal modo que hasta jugaban con una vejiga de vaca(es algo así como pegarle a un globo), o con una pelota de trapo.
En contra posición tanto Oscar como Ruper (los dos hijos menores), no sentían gran afinidad por el deporte con pelota, pero si adoraban ir de pesca. Por esto pidieron a su progenitora que les permitiera ir al río (el mismo que cruzaban su padre y sus dos hermanos todos los días para ir a trabajar).Ella pensó durante unos momentos y les dijo:-¡¡no lo se, podría ser peligroso!! -. Pero ante la insistencia de sus hijos les dio el permiso.
Ellos salieron corriendo contentísimos, entraron su casa, tomaron las cañas y se fueron a toda prisa. Tuvieron que caminar alrededor de un kilómetro y medio para encontrar una zona suficientemente profunda y apta para su propósito. Llegaron a una lugar conocido como “Los Caracoles” .A esa parte del río se le había puesto así porque particularmente ahí por una extraña razón las plantas estaban plagadas de estos moluscos. En esta región del curso fluvial existían grandes barrancos.
Después de que Oscar sacara unas lombrices con una pala pequeña que habían llevado, se sentaron los dos en la orilla del despeñadero, a pescar con los pies colgando hacia el agua. No estaban en un día de mucha suerte, ya que en una hora y media solo lograron atrapar una mojarra cada uno.
Habían pasado dos horas desde que llegaron, y el viento se había incrementado, había pasado de ser una insignificante brisa a ser un viento bastante perceptible. Pero a ellos esto no les afectaba en lo mas mínimo, por el contrario estaban contentos, ya que la presencia del viento les ayudaba a espantar los insectos.
Justo en el momento en el que Ruper comenta a Oscar:-no hay nada- el primero logra capturar un pez grande que le hundió muy rápido la bolla y le cimbró la caña. Ruper estaba desprevenido, y se asusto de gran forma cuando el pez se engancho en su anzuelo. Sin embargo lo saco y lo echó para arriba de los barrancos y cuando iba en el aire se desprendió solo, cayendo afortunadamente en la tierra y no en el agua. En ese instante la emoción de los dos niños aumento increíblemente. El suelo estaba húmedo. Oscar fue el primero en levantarse a verlo y al constatarse de su tamaño dijo:-¡¡¡¡wow, es enorme…!!!!-.Al oír estas palabras la emoción de su hermano aumento aun más.
Todo transcurrió tan rápidamente que hasta es difícil de narrar. En ese fugaz segundo Ruper intento darse vuelta pera ver su pez, pero la desgracia estaba con él: su pie resbaló, no se pudo sostener y calló al agua. Oscar no se dio cuenta de lo que sucedía hasta que oyó los gritos de su hermano, se puso muy nervioso y empezó a gritar. Fue inútil porque nadie lo escuchaba. Mientras la cabeza de Ruper se asomaba cada tanto, dándole tiempo para respirar .Pero algo era seguro: no resistiría mucho así. Oscar se tiro al suelo, intentando estirarse lo más que pudo pretendiendo alcanzar a Ruper. Pero no era suficiente, era demasiado chico y no llegaba. Lo más cerca que estuvo de alcanzar la mano de su hermano fue una vez cuando sus dedos apenas se rozaron.
Es insospechable la cantidad de cosas que pasaron al mismo tiempo por la cabeza de los dos niños.
Por un lado Oscar que se sentía impotente por no poder ayudar a su hermano, y que recordaba todos los momentos maravillosos que había pasado junto a él: los juegos, la escuela, y una gran cantidad de situaciones imposibles de describir con palabras, hasta las peleas parecían hermosos sucesos. Desde su corazón le pedía perdón al niño que ahora se estaba ahogando.
Por otra parte Ruper, que tenía en mente muchísimas más cosas que Oscar. Se acordaba de toda la familia: sus padres, que tanto lo adoraban, y todos sus hermanos en especial el que podía divisar de vez en cuando tirado sobre el barranco pretendiendo brindarle socorro. Por momentos pensó que su padre vendría a rescatarlo, pero el tiempo le llevó a recordar que Mingo no estaba en el lugar, ni en el momento preciso para ello. Recordaba la cantidad de acontecimientos memorables que vivió con sus seres queridos, a pesar de su corta vida. El que le resaltaba más de sus recuerdos era el de su padre en pleno invierno sentado frente a las estufa, contándoles historias, mitos y leyendas a todos sus hijos, que estaban a su alrededor; y a su vez al mirar hacia el otro lado ver a su madre cocinando y sacudiendo la cabeza de un lado a otro.
La tensión aumentaba más y más y las esperanzas de que Ruper se salvara se desvanecían con el correr del tiempo. Cada vez demoraba más en salir a la superficie y la desesperación aumentaba descomunalmente en los dos hermanos. El cansancio se fue apoderando poco a poco de Ruper. Su luz se fue desvaneciendo gradualmente.El agua que antes no tenia gusto alguno, se habia impregnado en un amargo sabor; su transparencia se tornó de un color negro amarronada. A pesar de ser pleno verano daba la sensación de que en ella había caído un inmenso bloque de hielo desde que Ruper ingresó al río.Parecia que los elementos de la naturaleza se convinaban para dar paso a la llegada de la muerte. Los ojos de Oscar se llenaron de lagrimas de dolor que ahora pasaban a formar parte de lo que estaba por asesinar a su hermano.El cielo también se oscureció de tal forma que parecia que iba a ocurrir un eclipce.Luego de unos segundos se podia ver a Oscar tirado en la orilla pero ahora con todo su cuerpo en la tierra, al momento en que los zapatos de Ruper se apollaron en el fondo del río.